miércoles, 26 de mayo de 2010

Formas verbales

Modo indicativo: caber
Presente

quepo
cabes
cabe
cabemos
cabéis
caben

Pretérito indefinido
cupe
cupiste
cupo
cupimos
cupisteis
cupieron


Modo subjuntivo: andar y errar
Pretérito imperfecto
andaba
andabas
andaba
andábamos
andabáis
andaban
Presente
yerro
yerras
yeera
erramos
erráis
yerran

Fernando de Rojas y La Celestina

La Celestina
Calisto, un joven noble apuesto y de preclaro ingenio, penetra persiguiendo a un halcón en la huerta donde se halla a Melibea, de quien queda profundamente enamorado. Ante el rechazo de ésta y aconsejado por su criado Sempronio, decide encomendar su cuidado a Celestina, para lograr por medio de ella el amor de Melibea. La alcahueta consigue mediante artimañas que Melibea se enamore de Calisto. Los criados de éste intentan explotar un beneficio propio la pasión de su amo: que había prometido una cadena de oro a Celestina si lograba entre todos enamorar a Melibea. Cuando esto sucede, los criados reclaman su parte y ante la negativa de Celestina, la matan. Son apresados y ejecutados por la justicia, de lo que Calisto tiene noticia al día siguiente. Concierta una entrevista una entrevista nocturna con Melibea; sube por una escalera de cuerda y cuando va a bajar para marcharse, se rompe la escalera y Calisto se mata. Ante la muerte de su amado, Melibea sube a una torre y se arroja desde ella tras declarar las causas del suicidio a su padre. Termina la obra con el llanto y unas reflexiones morales de Pleberio, padre de Melibea.